Un empate que no vale a nadie

 Granada y Sevilla empataron a un gol en un vibrante duelo andaluz, resultado que no contenta a ningún equipo ya que los locales siguen lejos de la permanencia y los visitantes desaprovechan la oportunidad de igualar al Valencia en la cuarta plaza de la clasificación.
El Sevilla mandó más y tuvo mejores ocasiones de gol en un partido cuyo protagonista fue el central local Diego Mainz, ya que adelantó a los suyos en el primer tiempo y se marcó en propia puerta el tanto de la igualada hispalense en la segunda mitad.
El Sevilla dominó desde el inicio con José Antonio Reyes y Víctor Machín ‘Vitolo’ muy activos, gozando el canario de dos buenas opciones para marcar en los diez primeros minutos, pero en la primera remató fuera en difícil posición un mano a mano ante el meta Roberto Fernández y poco después no llegó por milímetros a un gran pase de Denis Suárez.
El Granada, que innovó con tres medios centros jugando de inicio, mejoró con el paso de los minutos y se adelantó en el marcador en un saque de esquina forzado por el joven nigeriano Isaac Success, delantero del filial, y culminado por Mainz con un gran cabezazo.
Tras el 1-0 llegaron los mejores minutos de los locales, que pudieron ampliar su ventaja con un disparo de Robert Ibáñez que se fue rozando el palo y, poco después, en un despeje del sevillista Diogo Figueiras que llegó a tocar el poste de su propia meta.
El Sevilla retomó el mando del choque con el colombiano Carlos Bacca apareciendo por todos lados, aunque el empate se le negó en un testarazo que sacó Mainz bajo palos cuando el balón ya entraba y un buen chut después de un perfecto remate que no encontró portería. La segunda parte comenzó con una clara ocasión para cada equipo, ya que pudieron empatar los visitantes con un cabezazo de Denis Suárez que despejó balo palos el argentino Emanuel Insúa, y Sergio Rico evitó el 2-0 en un remate del portugués Daniel Candeias.
El paso de los minutos sentó mejor a los locales, que controlaron bastante bien a un Sevilla cada vez más ofensivo con la entrada al campo de Aleix Vidal y del argentino Éver Banega.
Sin embargo, cuando más cómodo parecía el Granada, un buen centro del propio Aleix Vidal desde la banda derecha fue introducido en su propia portería por Mainz (1-1, m.69). El empate sentó mejor a los sevillistas, que casi remontan el partido en otra buena llegada hasta la línea de fondo de Aleix Vidal que acabó con un remate fuera de Diogo. En los minutos finales menguó el dominio visitante y el choque se convirtió en un toma y daca entre los dos.