Conjura ante la batalla

No pudieron llevarlo en el secreto que hubieran deseado porque desde primeras horas de la mañana los periodistas ya se hacían preguntas. El departamento de prensa del club no tuvo más remedio que confirmarlo, hubo ‘tinina’, es decir, arenga presidencial, lo que pasa es que los responsables de comunicación del club dijeron que se trataba de una ‘comida de trabajo’.
Y, de hecho, así es. Al igual que el presidente blanquiazul cita en algunas ocasiones a trabajadores de la entidad para comer y hablar de distintos temas relacionados con el club, ayer Tino Fernández citó a otros trabajadores de la entidad, los futbolistas.
La semana pasada los jugadores también se reunieron con mesa y mantel para hermanarse más, si cabe, ante la dura tarea que viene por delante pero sin ‘el jefe’. La de ayer, con el que manda y su consejo a la cabeza, fue una comida convocada de manera rápida (algunos podrían pensar que casi fortuita) a la que asistieron además del presidente Tino Fernández y sus compañeros de directiva, la plantilla, el entrenador y todos los ayudantes del preparador blanquiazul.
Se celebró en un céntrico restaurante coruñés y sirvió para tomar fuerzas antes de la batalla más dura de la temporada, la que comienza este domingo con el envite ante el Espanyol.
Aunque los puntos no acompañan al juego del equipo tras haber sucumbido ante escuadras de gran potencial, el ambiente de la plantilla y la cohesión del vestuario, que quedó patente ayer una vez más, son la mejor garantía de que el objetivo de la permanencia no solo se puede conseguir, sino de que “se va a conseguir”, como dijo el propio presidente blanquiazul. Cuando el equipo esté salvado se organizará otra comida. Pero no de trabajo. La próxima será una ‘cuchipanda’ en condiciones.   n