Un Calafell más asequible

El Deportivo Liceo encara un compromiso de la segunda jornada que hace unos meses habría sido de la máxima dificultad, pero que a día de hoy se presenta como entre bastante y muy asequible.

Y es que su rival, el Calafell, está lejos del nivel que la pasada temporada lo llevó a una sorprendente tercera posición final. El motivo es, básicamente, la pérdida de Martí Casas, máximo goleador del ejercicio 2022/2023, ahora en las filas del Reus Deportivo.

El conjunto que entrena Ferran López mejoró levemente en el debut liguero la pésima imagen que dio en la Supercopa de España, donde fue triturado en semifinales (11-2) por el Barça.

Una mejoría que, no obstante, solamente le dio un punto (3-3) en la visita al ascendido Sant Just, en un choque donde fue siempre por detrás y que empató sobre la bocina con un gol del veterano Jepi Selva, una de las caras nuevas en el plantel. Las otras son Oriol Vives (procedente, al igual que Selva, del Lleida), Carlos Domenech (Sant Cugat) y Joan Pascual (Barça B).

Los de Juan Copa, por su parte, comenzaron goleando (6-1) al Igualada, en un duelo donde a los verdiblancos les costó algo coger ritmo. Pero el 1-1, al filo del minuto 15, y un posterior tiempo muerto pedido por el técnico coruñés le pusieron las pilas al vigente subcampeón liguero, copero y supercopero.

Tombita desniveló el marcador (2-1) y a partir de ahí el partido tuvo un nombre: Pablo Cancela. En su debut oficial en casa, anotó un ‘hat-trick’, con dos goles de falta directa –una de ellas ejecutada con una maestría y una pausa mágicas–, suerte en la que el Liceo carecía de un especialista claro. Y un chute de moral y confianza para un jugador al que en parte de la pretemporada y en la Supercopa se le vio algo falto de acoplamiento. 

La última vez que el Liceo y el Calafell compartieron pista fue en las semifinales de los pasados playoffs, una serie saldada con ‘rosco’ favorable a los verdiblancos (3-0), que ganaron los dos primeros en Riazor (4-3 y 4-1) y sentenciaron en el mismo escenario de hoy, el Joan Ortoll, con un triunfo en la tanda de penaltis tras acabar el tiempo reglamentario y la prórroga con 2-2. 

Copa sólo podrá contar con nueve jugadores, ya que a Bruno Saavedra, que padecía dolor en la mano izquierda, le fue diagnosticada una fractura de escafoides que le tendrá en el dique seco durante aproximadamente dos meses.