Los Rosales ya puede hacer “flips”

Algo más de 1.800 metros cuadrados de rampas, desniveles y barandillas con vistas a la Torre de Hércules. Los aficionados al patín estrenaban ayer la primera “skate plaza” de la ciudad, que el Ayuntamiento ha construido en el parque de Los Rosales, detrás de la escuela infantil. La infraestructura, que ha costado 164.000 euros, simula las formas del mobiliario urbano, como bancos, escaleras o planos inclinados, las mismas que los skaters usan para ensayar sus trucos en las calles y plazas de la ciudad y cuenta también con un pequeño “quarter”, un módulo en curva especialmente inclinado.
Se ha hecho, según destacaba ayer el concejal de Medio Ambiente, Enrique Salvador, siguiendo las directrices marcadas por los aficionados a esta disciplina, y atendiendo al cada vez mayor auge de este deporte urbano, que en la ciudad tiene ya varias décadas de tradición, como bien saben quienes pasean por la plaza de Pontevedra o la de la estación de San Cristóbal. También, con la aspiración de facilitar la convivencia entre patinadores y viandantes.

integrada
El Ayuntamiento ha invertido en la instalación 164.000 euros y ayer presumía de presentar ayer una de las “skate plazas” más importantes del noroeste de España, por dimensiones y por equipamiento, y un referente donde podrán realizarse exhibiciones, algo en lo que ya se trabaja, según confirmó el concejal.
Se eligió este modelo, cuentan desde Medio Ambiente, “por tratarse de la tendencia dominante en los países pioneros en la práctica del skate”. Pero además, la nueva instalación forma parte del plan de recuperación del entorno natural de Los Rosales y se integra en una antigua cantera, lo que según destaca el gobierno local “minimiza el impacto visual y mejora el aprovechamiento del espacio”. Las obras incluyeron el desbroce y limpieza del terreno; la excavación del recinto en tres niveles –las tierras de excavación de un nivel sirvieron de relleno para otro, por lo que no fue necesario aportar tierras de préstamo–; la instalación de la red de saneamiento y la construcción de los elementos que conforman el recinto (metálicos, de hormigón y de fabricación mixta), así como del pavimento de patinaje.
El resultado, según ambiciona el Ayuntamiento, servirá además para potenciar el uso de esta zona de esparcimiento, uno de los lugares con las vistas más espectaculares de la ciudad, al que se puede ir a caminar, con las mascotas o en bicicleta, y al que se puede llegar a pie, en transporte público y, ahora también, en skate.