El radar de Alfonso Molina se sitúa como uno de los veinte que más recaudan en toda España

En plena vorágine por la polémica sobre si se multa por temas de seguridad vial o para recaudar, un estudio de la entidad Automovilistas Europeos Asociados (AEA) incluye el radar de Alfonso Molina, a la altura de la Fábrica de Armas, en la lista de los veinte aparatos más sancionadores de todo el país. Esta noticia se da a conocer precisamente cuando también se trabaja para instalar una nueva herramienta de control de los conductores en Lavedra, en el entorno del Parque Ofimático.
El informe de la asociación destaca a Galicia como una de las comunidades autónomas en las que más dinero se recauda en concepto de multas gracias a las infracciones captadas por los radares. En el top ten de máquinas peligrosas para los contribuyentes se sitúan dos en Lugo, pero el aparato –relativamente nuevo– de Alfonso Molina ha conseguido situarse en poco tiempo entre los veinte primeros de España.
El sistema es capaz de captar los excesos de velocidad tanto en dirección salida como entrada a la ciudad, si bien la organización destaca el número de multas que interpone a los turismos y demás vehículos que circulan con destino a A Coruña. El límite, fijado en 80 kilómetros por hora, es sobrepasado con frecuencia aunque al verlo de frente los coches suelen disminuir la velocidad cuando van en el sentido contrario.   
En el puesto 21 del ranking está el radar de la avenida de As Pías, en el municipio de Fene (en la comarca de Ferrol). Allí los vehículos no pueden superar los 50 kilómetros pero, pese a los años que han tenido para acostumbrarse, muchos se olvidan.