La Policía Nacional mantendrá el refuerzo en el grupo de investigación

Cada detención que se realiza a raíz del robo en un piso suele venir precedida de una ardua labor policial. Y de hecho, resultados como la desarticulación de la banda georgiana establecida en Barcelona y que viajaba a la ciudad para robar cada fin de semana fueron posibles solo después de aumentar el número de agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Judicial en un 80%. Ayer, el delegado del Gobierno, Samuel Juárez, anunció que por  el momento, se mantendría ese refuerzo.
Esa declaración ha sido recibida de forma positiva por los sindicatos policiales CEP y SUP, que habían de forma reiterada más esfuerzos en investigación, y no dejarlo todo a la Seguridad Ciudadana. Consideran que así se les da la razón, aunque Juárez asegure que la “reasignación” es algo normal dentro del Cuerpo, y esperan que el grupo se mantenga durante mucho tiempo, a pesar de que es un poco heterogéneo.
Sandra Castro, del SUP, recuerda que dentro de ese grupo que se encarga de perseguir los robos se encuentran miembros de la Policía Judicial, de Seguridad Ciudadana y de la Unidad de Prevención y Reacción:  “Esperamos que no baje, pero es lo mismo de siempre: necesitamos un catálogo de puestos de trabajo más flexible. De lo contrario, no es más que otro parche que ponemos, como siempre”.

desde el verano
El incremento de investigadores se hizo poco a poco. Desde junio, recordó Juárez. Entonces los robos en pisos ya comenzaban a ser preocupantes, incluso antes del verano, cuando estalló como una bomba. Entonces empezó el lento trasvase de efectivos dentro de la Policía Judicial, que culminó cuando se incorporaron varios agente Seguridad Ciudadana. “Hoy en día, el grupo de delincuencia organizada es el que mejor está con diferencia”, señalan fuentes internas.
Pero todo es eventual. “Si mañana empezaran a robar coches, se les destinaría a investigarlo”, apunta Castro. EL problema es que los robos en pisos los realizan bandas especializadas, que apenas causan daños en la puerta para entrar en el domicilio, y que solo están unos pocos días en la ciudad. Hace falta especialistas para poder seguirles la pista, según Castro. De lo contrario, si se rebaja la presión, todo puede volver a empezar.