La Noche de San Juan acaba con un dramático rescate al pie de La Coraza

La Noche de San Juan acaba con un dramático rescate al pie de La Coraza

La tranquilidad que reinó durante toda la Noche de San Juan se truncó a las ocho de la mañana cuando un joven de 21 años, procedente de Guitiriz, decidió darse un baño al pie de la escollera de La Coraza, ignorando la prohibición vigente. Cerca de 25 efectivos de los servicios de emergencia formaron una cadena que luchó contra el oleaje y contra el propio joven que, ebrio, se resistía a ser rescatado, poniendo en gran riesgo la vida de varios agentes de Policía. El individuo en cuestión fue arrestado bajo los cargos de desobediencia a la autoridad y poner en peligro a los agentes.
El suceso ocurrió en un momento delicado del operativo de San Juan, cuando la playa estaba prácticamente vacía de festejantes, pero todavía no se habían llevado a cabo las labores de limpieza, ni se había puesto en marcha el servicio de socorrismo. Fue entonces cuando el sujeto decidió darse un chapuzón, en el peor sitio posible: al pie de La Coraza que separa Riazor del Orzán. “Hacía bastante oleaje y se metió entre los escollos”, comentaron testigos presenciales.
Afortunadamente, la zona estaba llena de efectivos de los servicios de emergencia, tanto de Protección Civil como la Policía Local, de manera que echaron a correr hacia el mar. Entre ellos se encontraba el jefe de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento, Carlos García Touriñán, que se lanzó a las aguas como uno más, mientras otros policías mantenían a raya a los curiosos.

el recuerdo de velicky
Fue un rescate difícil. A pesar de que el individuo estaba muy cerca de la orilla, volver a ella era un desafío porque la corriente golpeaba a los agentes y les retiraba la arena bajo sus pies. “Fue como lo de Velicky”; comentó uno de los participantes en la acción de Salvamento. En la mente de todos estaba el recuerdo del estudiante eslovaco, que murió junto a tres agentes de la Policía Nacional que intentaron rescatarlo en la playa del Orzán, en una noche de enero de 2012. Como entonces, los servicios de emergencia formaron una cadena humana para rescatar a la víctima y resistirse no solo a la fuerza del Atlántico, sino también a la de la presunta víctima, que se resistía.
“Oponía una resistencia pasiva”, asegura un testigo. El joven obligaba a los agentes a cargar con su peso muerto para sacarlo del mar, mientras tenían que luchar con el oleaje y el frío de las aguas. Fueron unos minutos escasos, pero angustiosos, que extenuaron totalmente a los policías. Cuando por fin consiguieron pisar la arena, uno de ellos se encontraba tan rendido que tuvo que ser trasladado al Hospital, aquejado de una hipotermia, al igual que un compañero suyo, que había tragado mucha agua, y el propio Touriñán, también agotado.
Por lo demás, durante la noche se contabilizaron un total de 130 traslados de personas accidentadas a los hospitales de campaña habilitados en el Paseo Marítimo con quemaduras (32), heridas leves (32), intoxicaciones etílicas (27) y limpiezas oculares (8). Además, se trasladó a 30 personas a centros hospitalarios, una cifra inferior a la del año pasado.

La Noche de San Juan acaba con un dramático rescate al pie de La Coraza

Te puede interesar