La mayoría de los alumnos coruñeses acudirán al colegio que era su primera opción

En el último día, y pese a lo que podría indicar la lógica, los colegios coruñeses recibieron una avalancha de solicitudes para entrar en sus listados de alumnos. Y es que la costumbre de dejar todo para el último momento se lleva incluso a la educación de los más pequeños. Sin embargo, en esta ocasión, y a diferencia de lo que venía ocurriendo en los pasados años, casi todos los niños podrán acudir al centro educativo elegido como primera opción.
Según los datos recabados por este diario –algunos centros educativos no quisieron proporcionar las cifras de sus inscripciones y otros todavía estaban trabajando al cierre de esta edición en ellos, puesto que el registro telemático estaba activo hasta la medianoche– la mayoría de centros educativos no llegaban a cubrir las plazas ofertadas en esta primera etapa, aunque con sonadas excepciones que se producían en algún colegio público y varios concertados.

Así, mientras en el CEIP Cidade Vella les quedaban libres diez de sus 25 plazas, en el Raquel Camacho sobraban veinte puestos y en el Curros Enríquez solo cubrían 16 de 28, en el Fernández Latorre tenían 60 peticiones para 55 plazas y en el Manuel Murguía superaban también en cinco niños el cupo establecido.

En el mismo caso se situaban en el CEOP Plurilingüe de San Pedro de Visma, donde había una cuota de 25 plazas y ya iban por las 34, y con más padres entrando a hacer la inscripción. De hecho, desde este centro incluso señalaron que se planteaban pedir un aumento del cupo a la inspección educativa. La enseñanza concertada es, de nuevo, la que más lista de espera acumula, con cifras más altas en el Compañía de María, donde ofertaban 83 plazas y a media tarde ya contaban con más de 103 inscripciones, y en el Liceo La Paz, en el que seguían recibiendo solicitudes cuando ya se superaban en diez las 125 plazas disponibles. Con todo, algunos de estos colegios concentrados terminaron con algunas plazas sin cubrir o muy cerca de dejar el cupo completo.
Fue el caso de Calasancias, donde a una hora de cerrar el plazo quedaban seis vacantes, Hijas de Jesús, a las que les quedaba solo un puesto que esperaban cubrir en el último momento, o el Sagrado Corazón, que aseguraba que no completaba todavía sus 75 plazas.