Más del 70% de los jóvenes no pide permiso para compartir imágenes de otros en las redes

Más del 70% de los jóvenes no pide permiso para compartir imágenes de otros en las redes

Más del 70% de los jóvenes admite no pedir nunca permiso para compartir imágenes de otros y tampoco sabe cuántas fotos suyas podrían estar en circulación por las redes sociales, según se desprende de una encuesta promovida por la Fundación María José Jove y la Asociación Participa entre jóvenes de entre 13 y 16 años de A Coruña y Santiago de Compostela.
Ambas entidades son organizadoras de las sesiones “enREDados” de la VI edición del programa de Acción Juvenil Actúa y han impulsado la realización de más de 500 encuestas sobre el uso de los móviles y de las redes sociales entre la población más joven. Según los resultados, Instagram se consolida como la red social más relevante para la “cultura de la imagen”, mientras que Whatsapp, Youtube y Snapchat son otras de las más populares.
En la vida cotidiana, el 70% no concibe estar sin el móvil en actividades como comer, pasear o reunirse con la familia y los amigos. Los encuestados incluso admiten que sus horas de sueño se han reducido desde que se encuentran conectados a internet y que revisar el móvil nada más levantarse se ha convertido en un hábito.
Por otra parte, el 60% de los jóvenes participantes reconoce haber tenido algún conflicto o haber sufrido amenazas a través de las redes, algo que no les parece importante, a pesar de saber el significado del término “ciberbullying”. Sin embargo, los jóvenes desconocen la relevancia de su privacidad, seguridad y buen uso a través de plataformas web.

Controlados por los padres
En cuanto al control familiar del uso de los móviles, el 65% de los jóvenes declararon sentirse “controlados” y haber pactado con sus padres normas y horas de uso, que en el 90% de los casos suelen ser entre 1 y 3 horas diarias o incluso 6 en caso de fines de semana.
El objetivo de las sesiones de “enREDados” fue la formación no solo de adolescentes, sino también de padres y profesores para afrontar el uso y control de los dispositivos móviles y sus aplicaciones y redes sociales. 
La fundación coruñesa asegura que existe una toma de conciencia generalizada en docentes y familias sobre la necesidad de conocer los usos de los menores en las redes. Más de la mitad de los jóvenes del programa sabe y acepta que sus padres revisan sus dispositivos, los mensajes e imágenes que envían y los sitios de Internet que visitan.
La Fundación María José Jove y la Asociación Participa han divulgado toda la información y ejercicios de las sesiones en la web buentratoenlared.org, con la finalidad de ponerlos a la disposición de los centros educativos. l

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