Más de 440 viviendas entran en el plan de aislamiento acústico del aeropuerto

El Plan de Aislamiento Acústico del aeropuerto de Alvedro roza ya las 2.000 viviendas susceptibles de necesitar algún tipo de insonorización para evitar los molestos ruidos generados por los despegues y aterrizajes de los aviones. Esta cifra se ha alcanzado después de que ayer los representantes de AENA dieran cuenta de la inclusión de otros 444 hogares durante la reunión de la Comisión de Seguimiento Ambiental de la infraestructura.
AENA mantuvo ayer un encuentro de trabajo alrededor de las afecciones medioambientales de Alvedro con personal del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, la Xunta y el Ayuntamiento de Culleredo. En el transcurso del mismo, en el que se analizaron diversos temas de importancia, se debatieron con especial interés los avances del Plan de Aislamiento Acústico (PAA) presentados por parte de la institución encargada de gestionar la infraestructura.
Esta explicó que desde la anterior junta de la comisión 444 viviendas se han sumado al programa y está “en tramitación el expediente de otras 17 viviendas más, que tienen pendiente la presentación de documentación”.
Esto eleva el total de propiedades integradas en el plan a 1.999, todas ellas ubicadas en el municipio de Culleredo en el que está ubicado el aeródromo.
Según comentaron desde AENA todas podrían necesitar aislamiento acústico, si bien los técnicos irán analizado caso por caso antes de acometer reformas. Por el momento, y tras la realización de una serie de mediciones acústicas en el interior de algunas casas que se incluyeron en el listado durante la junta anterior, se han aprobado actuaciones para reducir el impacto sonoro de las operaciones de vuelo en 118 hogares.
“Para la realización de las mismas, se licitará próximamente el conjunto de las obras para optimizar los recursos disponibles”, explican fuentes del aeropuerto. Asimismo la pretensión es que afrontando los proyectos en paralelo se “reduzca el tiempo de ejecución y se libere a los propietarios de realizar estas gestiones personalmente”.
De hecho, toda precaución es poca para evitar molestias a los vecinos del núcleo de Culleredo que podrían verse más afectados una vez esté terminada la ampliación de 400 metros de la pista, que tendrá su control.