Maconia presenta su repertorio de pop rock con sabor a tango en la sala Garufa

 Maconia tiene su campamento base en Alcorcón aunque desde allí su vocalista Alejandro López lanza un flotador al Atlántico y llega hasta su querido Buenos Aires. El único argentino del grupo Maconia habla de lo que será el comienzo de su gira esta noche, a las 23.30, en la sala Garufa.

Allí se presentarán vestidos de etiqueta, la ocasión lo merece, para ofrecer su repertorio de rock y mucho pop con coletazos del indie, que es hacia donde se dirige la formación tras el fichaje del nicaragüense Will Galgo. La banda introduce en su pastel un poco de bossa nova y temas en portugués que le dan un toque bizarro y enriquecen la receta para irse a las versiones y crear las suyas propias sobre temas de Pearl Jam, Caetano Veloso, The Beatles o The Doors. Maconia llega a la ciudad con su primer disco homónimo debajo del brazo tras seis años en activo.

Sin embargo, las dificultades económicas ralentizaron un proceso que finalmente se materializó a caballo entre Argentina y Alcorcón para recibir algunas colaboraciones desde Suecia e incluso procedentes A Coruña.

En este sentido, el resultado son un puñado de canciones que respiran del mundo. Ellos muestran su compromiso social para hablar de la emigración y de la locura colectiva.

También tratan sus propias vivencias en letras fuertes y contundentes: “Son duras pero no oscuras”, dice Alejandro, porque a la vez sus estribillos metafóricos comulgan con la forma de hacer del conjunto, que es alegre. No hay ningún tipo de ideología política inmersa en sus temas. Solo retazos del presente pasados por la centrifugadora de ideas.

Para presentar todo esto en la sala de la Ciudad Vieja con el pimentón que da el directo. Así es como después de A Coruña vendrá Madrid y Barcelona porque ante las adversidades hay que moverse, señala Alejandro, “o nos comen los piojos como decía mi abuelo”. De esta forma, una batería, un bajo, un teclado y dos guitarras viajan sobre cuatro ruedas desde Alcorcón. En el maletero, además de víveres, están las ganas de no defraudar en una noche donde el pop tendrá influencias tangueras.