Un fuego deliberado calcina 20 hectáreas de monte entre Bens y O Portiño

Un fuego deliberado calcina 20 hectáreas de monte entre Bens y O Portiño
El Ideal Gallego-2015-08-03-004-ef45dc1c_1

La ciudad amaneció velada por la nube que producían más de 20 hectáreas de monte bajo entre Bens y O Portiño al arder, llenado la ciudad de olor a humo y ceniza. Para la gran mayoría de los coruñeses, ese fue el primer aviso de que estaba teniendo lugar un gran incendio forestal pero, en realidad, el fuego había comenzado a medianoche. Los bomberos municipales de Arteixo y A Coruña, junto con las brigadas de la Xunta, habían estado combatiéndolo desde entonces. No fue hasta las diez y media que lo dieron por controlado pero, a las tres y media de la tarde, un nuevo foco volvió a desatar las alarmas. Cuatro horas después, la situación volvía a estar bajo control, tras haber recurrido a medios aéreos como helicópteros e hidroaviones. 
Fuentes de los servicios de emergencia consideran que “es evidente” que los dos incendios fueron deliberados. El primer foco tuvo lugar cerca de la cúspide del monte Cortigueiro, en la zona conocida como Alto de Bens, a escasos metros de la chatarrería Mata. El viento dominante empujó las llamas hacia Bens, devorando gran cantidad de monte bajo. Según Medio Rural, casi todo el terreno consumido por las llamas eran matorrales, excepto media hectárea de terreno que estaba cubierto de árboles. 

daños en la propiedad
A las cinco de la madrugada, el fuego, moviéndose en un frente de 500 metro de ancho, ya había alcanzado los límites de la chatarrería. Las llamas comenzaron a devorar entonces parte del material acumulado, incluida una cinta transportada de más de seis metros de largo y unas orugas. Material de repuesto, según la empresa, que valoró las pérdidas en 500 euros. Sin embargo, la labor de los equipos de emergencia, que emplearon excavadoras para crear cortafuegos, consiguió evitar que el fuego llegase al poblado de Bens más de diez horas después de iniciarse las labores de extinción. 
Pero la situación dio un vuelco a las tres y media de la mañana, cuando las llamas volvieron a elevarse monte abajo, cerca del camino de acceso a la chatarrería, obligando a los servicios de emergencia tuvieron a actuar otra vez. La diferencia es que en esta ocasión pudieron contar con medios aéreos de extinción, que no habían podido utilizar antes debido a que las líneas de alta tensión de monte Cortigueiro habían impedido hacer vuelos rasos a los hidroaviones. Tres de estos aparatos y dos helicópteros  ayudaron a controlar el fuego a las siete y media de la tarde. Se calcula que los bomberos gastaron 300.000 litros de agua.

Un fuego deliberado calcina 20 hectáreas de monte entre Bens y O Portiño

Te puede interesar