La fiesta deja 190 toneladas de residuos en los arenales de la ciudad

La fiesta deja 190 toneladas de residuos en los arenales de la ciudad

Un año más, la nota más negativa del San Juan coruñés fue la de las toneladas de basura que los servicios de limpieza tuvieron que recoger de los arenales tras la fiesta nocturna, con la playa del Orzán como el lugar en el que más a fondo se tuvieron que emplear los operarios. En total, fueron 190,2 toneladas de residuos, una cifra bastante inferior con respecto a los 211 del año pasado.
Como es habitual, la playa del Orzán fue el lugar en el que más a fondo se tuvieron que emplear los servicios de limpieza, que comenzaron sus labores poco después de la salida del sol, cuando todavía quedaban sobre la arena grupos de jóvenes, algunos despiertos y otros dormidos.
María García, concejala de Medio Ambiente, destacó a media mañana que el contraste en la limpieza entre el Orzán y el resto de playas de la ciudad era bastante grande. “A imaxe do Orzán sempre é a máis importante, pero temos que felicitarnos de que en praias como San Amaro, Oza, Matadoiro e Riazor, o comportamento foi bastante bo e nesa liña temos que seguir traballando”, afirmó.
La responsable de Medio Ambiente del Ayuntamiento destacó que una parte importante de las 190 toneladas de basura fue depositada en los 14 puntos específicos que se habían instalado en el Paseo Marítimo y en el resto de playas. En relación al vidrio, este año se recogieron 3.000 kilos, cinco mil menos que en 2015.
La imagen matutina fue similar a la de años anteriores a pesar de los buenos datos y de que el Ayuntamiento había instalado contenedores para que la gente pudiese depositar los residuos tras la fiesta, había reforzado la señalización de los puntos para tirar los objetos de vidrio con lonas reflectantes, globos con leds y monitores para facilitar esta labor, y repetido una campaña de reciclaje de vasos con premios para los participantes.
Además, este año se facilitaron como novedad espacios para depositar papel y cartón, de los que se recuperaron un total de 80 kilos.
El arenal del Orzán fue en el que más gente se congregó para celebrar la fiesta de San Juan y el espacio preferido por los adolescentes. Al amanecer, la imagen habitual era la de todos los años con montones de bolsas de plástico, botellas y vasos como objetos más comunes junto a las maderas utilizadas para hacer hogueras, algunas todavía encendidas. Además, también había otros elementos como sillas de playa, barbacoas portátiles o toallas.

La fiesta deja 190 toneladas de residuos en los arenales de la ciudad

Te puede interesar