Un día en el que lo único que cuenta es disfrutar

María Pita fue el escenario de la XX Carrera Alternativa en la que se dieron cita más de 3.500 participantes. Bajo el lema “Por un deporte sin violencia”, la ya tradicional prueba no competitiva recorrió varias calles del centro de la ciudad. Corriendo, andando, en bicicleta, en silla de ruedas... Los coruñeses participaron activamente no solo en el recorrido, sino en las actividades que se realizaron en la propia plaza consistorial.
La organización, capitaneada por Eduardo Blanco, valoró muy positivamente el decidido apoyo de patrocinadores, Diputación y Ayuntamiento. De hecho fue el propio alcalde, Carlos Negreira, el encargado de dar la salida acompañado por Fernando Romay, un habitual de la carrera alternativa desde su primera edición.
El objetivo de fomentar el deporte social siempre se ha cumplido desde 1995, cuando la prueba comenzaba en María Pita y finalizaba en un centro comercial coruñés. De hecho, son bastantes los participantes que han estado en todas las carreras. Las familias pudieron participar en numerosas actividades como autisport, malabares, diábolos, patines, hockey, dardos, discos, juegos de raqueta... Además los asistentes bailaron zumba y bokwa al ritmo de la música, amén de disfrutar de un masaje, aprender reanimación cardiopulmonar o ejercicios hipopresivos.
Los organizadores reconocieron el esfuerzo para llevar a cabo esta carrera y mostraron su apoyo para la edición número 21 del próximo año.