El Ayuntamiento precinta el Remanso sin la oposición de la concesionaria

El Ayuntamiento procedió ayer sobre las ocho de la mañana al desalojo de la cafetería Remanso después de que un auto judicial le diera el permiso para hacerlo tras 17 años de impagos.
El precintado del local se llevó a cabo sin la oposición de los encargados del local, a los que les dejarán unos días más para retirar todo el mobiliario del interior.
La firma Pezetace, SL abandonó así a la fuerza el número 70 de Fernández Latorre con una deuda a las espaldas de 44.931 euros, que viene de la suma de 2.216,48 euros al año desde 1997. Por este motivo, la concejalía de Hacienda notificó en febrero de 2013 la incoación de un expediente de resolución del contrato concediéndole un mes para que la otra parte se presentara en María Pita. Nunca llegó a hacerlo.
En abril, la resolución colocó la pelota en el tejado del Ayuntamiento al poner a su disposición las instalaciones de Cuatro Caminos con una prórroga de un mes más para que el responsable depositara las llaves con la condición de que de no hacerlo, se procedería a la ocupación forzosa del negocio.
Pezetace solicitaba entonces la suspensión cautelar del dictamen mediante un recurso contencioso-administrativo, que en noviembre quedó ordenado al no presentar la empresa los 50.000 euros de aval necesarios para levantar su ejecución.
El desenlace tuvo lugar en septiembre cuando el juzgado de lo Contencioso-Administrativo dictaba sentencia y fijó un mes para que el dueño hiciera las maletas de forma voluntaria, algo, que según la concejala Rosa Gallego, nunca se tomó en serio. Aunque la sociedad todavía tiene derecho a apelar el veredicto, no habrá vuelta atrás a una actuación a la que le seguirá la adaptación del espacio a una especie de centro social que dé cobertura al barrio. n