“Ese día no era yo”, alega ante el TSXG el hombre que quemó a su bebé en Paderne

“Estoy cumpliendo una condena y no estoy pensando en los años, estoy pensando en mi hijo, y tengo muy claro que ese día no era yo”. Sin negar los hechos, el vecino de Betanzos condenada 23 años de prisión por hacer explosionar una bombona de gas dentro de su coche con su hijo de 14 meses en el interior reiteró ayer ante los magistrados del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que estudian su recurso de apelación los motivos que, alega, le llevaron aquel 10 de octubre de 2010 a acabar con la vida de su bebé en una carretera secundaria de Paderne.

“Ese día fui amenazado, y en días anteriores...”, aseguró, en referencia a las múltiples llamadas que en aquella jornada recibió de la madre del menor, la última de las cuales se efectuó desde el cuartel de la Guardia Civil.

La tesis que quiere hacer valer su defensa es que las presiones que recibió por teléfono a manos de su expareja llevaron al cuadragenario a un estado de “arrebato pasional” que agravó su cuadro clínico –sufre un trastorno de personalidad– en el que perdió el dominio sobre sus actos. En este sentido, la abogada censura que la sentencia por la que la Audiencia sancionó al autor confeso del crimen por un delito de asesinato incurra en “errores jurídicos” al establecer que concurrió alevosía, ensañamiento y varias circunstancias agravantes más, que llevaron a la magistrada que la firmó a hablar de una muerte, la del bebé, “especialmente cruel y dolorosa”.

por desvalimiento

En apoyo a la sentencia, el representante de la Fiscalía se mostró ayer contrario a las alegaciones de la defensa y pidió la confirmación del fallo al entender probado, como lo vio el jurado, que el hombre sentado en el banquillo actuó de manera alevosa. “Hay alevosía por desvalimiento, porque un bebé no tiene forma humana de defenderse”, sostuvo, al tiempo que respaldó el ensañamiento: “Una muerte rápida no es incompatible con ello”.