No solo durante las obras, una vez que el tren al Puerto esté en funcionamiento, se producirá “un incremento de los niveles sonoros de la zona” y, por lo tanto, “un descenso de la calidad de vida de las personas que habitan en sus proximidades”. Una circunstancia lógica que ya pusieron de manifiesto los propios vecinos de asociaciones como la de Morás y que, incluso, reconoce el propio estudio de Fomento.
Durante el periodo en el que se ejecuten las obras del acceso ferroviario a Langosteira, los vecinos tendrán que soportar voladuras. Los vecinos de núcleos como Suevos, Rañobre o en la parroquia de Morás ya son expertos en las consecuencias que tienen estas explosiones, ya sea por la dársena o por el polígono industrial.
Contaminación
“Dicha acción, aunque de carácter puntual, tendrá una repercusión sobre los vecinos de las poblaciones cercanas, disminuyendo su calidad de vida, especialmente por el aumento del ruido y de la contaminación atmosférica”.
Una vez que acaben con esos trabajos, los vecinos no podrán cantar victoria. Comenzará la afección sonora de la propia infraestructura. En este caso, las opciones planteadas en el estudio encargado por Madrid reconoce que la alternativa más perjudicial para los residentes en la 3 (la que defiende Fomento), mientras que la 1 y la 2 A son las que tienen un menor impacto.
Salvo en el aspecto económico y los plazos de ejecución, la opción tres es la que presenta mayores inconvenientes en los apartados que analizan los técnicos. Por ejemplo, otro de los puntos en los que suspende es en los movimientos de tierras ya que “triplica” al de la dos.
Accesos a los núcleos
Otro de los aspectos que aparecen recogidos en el documento es la facilidad de acceso a los núcleos ya existentes durante los trabajos y una vez que estos terminen.
Cuando el tren ya esté operativo, no se producirá ninguna incidencia en este respecto ya que los “accesos afectados por las obras serán completamente repuestos y se facilitará el acceso de los mismos a la nueva vía”, indican en el estudio.
Otra historia será el momento en el que los operarios estén trabajando. De nuevo, la alternativa 3 es la peor valorada por los técnicos ya que “presenta una mayor afección” sobre el corte de carreteras y caminos. No obstante, cualquier trazado que se elija afectará a los vecinos en este punto.
Patrimonio
Dicen los expertos que en ninguno de los trazados planteados “se esperan afecciones importantes” que afecten al patrimonio arqueológico y etnográfico.
De nuevo, la opción 3 vuelve a ser la peor. La tres es la única que afectaría a bienes etnográficos: un hórreo, un cruceiro y un molino. Mientras que en la opción 2 A y B no atraviesan “elementos de interés” y los que existen, están “degradados”.