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jueves | 25 abril | 2024
La reapertura de la piscina municipal de A Barcala se va a demorar más de lo que querrían no solo los vecinos, sino también el nuevo Gobierno local. Así lo hicieron saber ayer, cuando desde el Ayuntamiento anunciaron que “graves problemas” detectados –concretamente en la cubierta de la instalación– por la empresa que lleva a cabo los trabajos de reforma hacen que, por ahora, no se pueda abrir al público.
La intención del Gobierno cambrés era, como recordaron, “abrir la piscina en las próximas semanas”, una vez que concluyeran las obras de reforma que se acometen desde el pasado mes de marzo.
No obstante, en el marco de esos trabajos se ha detectado “un problema” que, en estos momentos, impedirá que los vecinos puedan disfrutar de la instalación.
En concreto, explica el consistorio, “se han observado una serie gritas en la cubierta que filtran gran cantidad de agua al interior”, una deficiencias que deberán ser reparadas “de forma urgente” antes de que vuelva la época de lluvias y que ponga en peligro la reforma que se realiza.
Al parecer, ese mal estado de la cubierta fue comunicado por parte de los técnicos de la empresa al anterior gobierno local, “pero éste no alertó de este grave problema estructural al nuevo ejecutivo, que ahora se encontró con esta situación”, lamentaron.
mayor coste
De cara a la solución a este contratiempo, el alcalde, Óscar García Patiño, asegura que esta pasa “necesariamente” por repararlo “lo antes posible”, aunque sí advirtió de que el coste de la reforma actual “aumentaría de forma considerable”, según le transmitieron los técnicos municipales.
Hay que recordar que la obra que se está terminando en estos momentos en la piscina se adjudicó por casi 320.000 euros, siendo la aportación provincial de la Diputación de 240.000, lo que supuso el 75% del total.
Por este motivo, García Patiño pedirá esta próxima semana un encuentro con el gobierno entrante de la Diputación coruñesa para que el coste de la reparación de la cubierta no sea haga con cargo exclusivo a las arcas municipales.
“Llegamos al Gobierno con unas obras contratadas y prácticamente ejecutadas. Ahora resulta que no podemos abrirla al público porque la empresa detectó un problema más grave en la cubierta que puede dañar toda la estructura interior y que no ha podido solventar porque no estaba en el proyecto inicial”, explicó el regidor.
