El Ayuntamiento de Arteixo espera que con el comienzo de la temporada de verano, a mediados de junio, no quede ni rastro de lo devastador que ha sido el invierno para la costa. Por ello, desde la Concejalía de Obras calculan que entre abril y mayo se inicien las actuaciones necesarias para la puesta a punto de los arenales.
Por delante les quedará un trabajo tan duro como caro, ya que según el informe que han remitido desde la administración arteixana al Estado, solo en lo que se refiere al litoral, los daños ascienden a 364.487 euros. Un dinero con el que tendrán que renovar la práctica totalidad del mobiliario urbano, además de diversas infraestructuras.
Casi todas las playas de Arteixo acumulan desperfectos. Las más populares son también las que necesitarán una puesta a punto más intensidad, ya que la marejada se cebó con estas instalaciones y sus servicios.
Valcobo
Una de las playas más afectadas es la de Valcobo, que después de tres meses de lluvias y alertas rojas por oleaje y viento está irreconocible. La fuerza del mar ha hecho desaparecer los 20.000 metros cúbicos de arena que se depositaron del material excedente del Puerto Exterior el año pasado y ha convertido la playa en un pedregal.
En esta playa los temporales han destruido el bombeo y la canalización de pluviales. A simple vista se encuentra los tubos de hormigón y las alcantarillas, la que no ha sido levantada, se ha quedado al descubierto. Solo reparar esta red costará 51.600 euros.
Otros daños
A los casi 60.000 euros de la red de pluviales de Valcobo habrá que sumar el acceso rodado y peatonal tanto en este arenal como en otros del municipio. En esta apartado, los técnicos municipales incluyen todas las playas afectadas: Combouzas, Valcobo, Valcobito, O Reiro, Sabón y Barrañán con un presupuesto de 155.016 euros.
Los pavimentos, barandillas y mobiliario destrozados tendrán que ser reparados por 31.800 euros. Mientras que las casetas, sanitarios y equipos de jardinería suman 60.600 euros, cantidad a la que hay que sumar los 12.240 euros que costará reponer las duchas y lavapiés.
En el arenal de Sabón, parte de la pasarela de madera continúa sin ser transitable y rodeada por la cinta policial. El hundimiento de los tablones se debe a un corrimiento de tierras. Situación similar se da en la playa de O Reiro. Mientras la pasarela se curva ligeramente, las tuberías han quedado al descubierto y algún que otro poste de luz casi está en el aire.
Las estimaciones que hacen desde el Ayuntamiento prevén 8.886 euros para solucionar los diferentes desprendimientos de tierras y atascos varios.
Otra de las partidas que incluyen los técnicos en el citado informe para completar la lista de desperfectos causados por las ciclogénesis explosivas asciende a 31.625 euros. Este dinero se destinará a reparar las diferentes propiedades privadas afectadas por el oleaje.
Aunque han sido muchas las alertas y temporales que se han acumulado en los últimos tres meses, la ciclogénesis explosiva que causó un mayor número de daños y que casi no dejó nada a su paso fue “Nadja”. n