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jueves | 25 abril | 2024
El departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Arteixo anuncia que instalará cámaras en zonas habitualmente usadas como vertederos incontrolados para localizar y sancionar a los infractores. Desde el Gobierno de Carlos Calvelo inciden en que están “finalizando os trámites legais” para colocar los apartos de grabación.
El titular de esta área, Víctor Merelas, señala que cuentan con una estadística de los puntos de vertidos retirados hasta el momento mediante el protocolo municipal y que el pasado 2016 se detectaron 141 zonas donde se depositaron residuos sin control alguno, lo que supone un aumento del 131% respecto al año anterior (61 vertederos).
señalización
Desde Arteixo apuntan que la concejalía de Medio Ambiente ha iniciado en el municipio una campaña de señalización en los puntos habituales de los vertederos, advirtiendo de que las sanciones por este tipo de conductas incívicas van desde los 900 hasta los 45.000 euros, según la gravedad del vertido.
En el departamento de Medio Ambiente, explican, se encargan de vigilar, retirar y gestionar la eliminación de los vertederos, a través de dos guardias ambientales adscritos a esa área. Apuntan que dicho personal se encarga, además, de investigar el posible origen de cada vertido y los causantes del mismo.
Según fuentes del Ejecutivo local, los vertederos suelen aparecer en caminos de zonas rurales, con alguna excepción próxima a los entornos más urbanos. “En calquera caso, o que si se pode afirmar é que a orixe destes residuos semella ser a realización de pequenos arranxos domésticos e mudanzas. Tamén se teñen detectado puntos con residuos procedentes de obras maiores e actividades mercantís e industriais”, explica Merelas. En algunos casos, a partir de las investigaciones del departamento de Medio Ambiente y del Seprona, se instruyen expedientes sancionadores contra los causantes de los focos residuales. Si no se detecta al responsable, simplemente se procede a la retirada de los desechos.
La localización de los vertederos puede realizarse tanto por aviso de los vecinos o directamente por los guardias ambientales, que luego envían un informe a la Policía Local, a la Guardia Civil y a la Policía Autonómica. Desde el área municipal de Medio Ambiente indican que entre el avistamiento y la retirada del foco de residuos incontrolado pueden pasar un máximo de dos semanas.
