Reportaje | A bordo de un barco del siglo XVII que ha recorrido medio mundo

En las mismas aguas donde normalmente recalan cruceros, barcos de recreo y mercantes o pesqueros de todo tipo, atracó estos días un buque completamente distinto, el galeón ‘Andalucía’, una réplica de un galeón español del siglo XVII. Llegó a principios de semana a los muelles herculinos y, este fin de semana los coruñeses pudieron subirse a bordo para conocer la historia marítima detrás del buque, cómo es la vida a bordo actualmente y disfrutar de las recreaciones y sus diferentes cubiertas. Este domingo es el último día para visitarlo, en horario de 10.00 a 18.00 horas, en el muelle de Calvo Sotelo.

A pesar de las intensas lluvias, los coruñeses se están acercando a visitar el barco. La responsable de logística de la Fundación Nao Victoria, a la que pertenece el galeón, Marina Quesada, asegura que las visitas las están disfrutando niños y mayores. Los primeros “porque alucinan, les encantan los cañones y dicen siempre que es un barco pirata”, comenta riendo. Los segundos, porque “en esta zona interesa mucho la historia naval y marítima”, asegura. 

Quesada explica que es una réplica que “representa a todos los galeones de España del siglo XVI al XVIII”. Tras “establecer relaciones” con puntos como Filipinas o Manila, “hacían viajes de ida y vuelta, con la única intención de cargar bodegas de cosas valiosas por entonces, como especias, oro, plata o seda, para traerlas a España”.

El galeón ‘Andalucía’ llama la atención, indica, porque parece más pequeño de lo que realmente es. “Lo que más impresiona a la gente es que, desde fuera, no parece que el barco sea tan amplio por dentro, se pueden ver siete cubiertas”, apunta, antes de añadir que la que más atención reclama de los visitantes es la de artillería. Una cubierta dedicada al completo a la defensa, “porque al llevar mercancía valiosa, eran atacados constantemente”. Mirando con una sonrisa hacia los cañones dispuestos a babor y a estribor aclara que “hoy en día, no funcionan, pero son de hierro fundido”, como lo eran los de los barcos de la época.

Viajes y tripulación

El galeón, desde su botadura, ha recorrido medio mundo. Ha visitado Shanghai, EEUU, Canadá, Países Bajos, Alemania, Francia o Inglaterra, entre muchos otros países.

Ahora, recorrerá puertos españoles antes de volver a casa. En su interior, una tripulación de 20 personas, que viven en el buque histórico durante las travesías.