El periódico del miércoles 7 de abril de 1999 destacaba como noticias más importantes la petición de los procuradores de tres juzgados más para A Coruña, la colocación de las vigas en el viaducto de Perillo y la unión de los vecinos de Lonzas contra el centro antidroga.
Los vecinos de la zona de Lonzas y Joaquín Planells contarán en breve con una agrupación de vecinos que se integrará en la Asociación de Vecinos "Os Anxos" de San Cristóbal das Viñas, en donde entrarán a formar parte del colectivo con cierto grado de autonomía. El colectivo vecinal, que se unió a raíz de la polémica suscitada en la zona por la previsible implantación de un centro de drogodependencias en una parcela anexa al centro de formación de la Cruz Roja, ha adoptado esta decisión en una asamblea celebrada ayer en un garaje y que congregó a cerca de doscientas personas en contra del traslado del centro asistencial que está situado actualmente en la ronda de Nelle.
Fomento dio ayer un paso más en la construcción de los nuevos accesos a la ciudad con la colocación de dos planchas de hormigón del futuro viaducto de enlace con Perillo. La magnitud de la actuación y el despliegue de medios materiales y humanos que ayer se concentraron en esta zona llenó de curiosidad a vecinos y viandantes, que se apostaron en las inmediaciones para seguir la colocación de las vigas de cemento armado sobre las que circularán los vehículos que se dirigan por la carretera de Madrid hasta A Coruña.
El conselleiro de Industria y presidente del comité local del Partido Popular de A Coruña, Antonio Couceiro, quiso apoyar con su presencia la campaña de donación de sangre promovida por los miembros de Nuevas Generaciones. Couceiro acudió ayer, a las seis de la tarde, a la unidad móvil del Centro de Transfusiones de de Galicia para respaldar con el ejemplo la campaña de concienciación que los jóvenes del Partido Popular desarrollaron ayer por segunda vez.
Nourredine Naybet sigue siendo el centro de atención de la actualidad blanquiazul y es que al defensa internacional marroquí no le faltan "novias" para cambiar de aires. Sin embrgo, el jugador no tiene en su poder la llave para tomar una decisión, ya que su cláusula de rescisión es escandalosamente alta (22.000 millones de pesetas) e impone respeto a aquellos equipos que añoran tenerlo en sus filas.
Hace 50 años |
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